viernes, 17 de septiembre de 2010

“MUJERES MIGRANTES EN LA BIBLIA”

PARROQUIA DE SANTA MARTA EN LA Y GRIEGA
SEPTIEMBRE MES DE LA CELEBRACIÓN DEL MIGRANTE EN LA IGLESIA CATÓLICA DE COSTA RICA
2010


 TEMA
“MUJERES MIGRANTES EN LA BIBLIA”

El tema de la migración como expresión de la realidad sociopolítica, cultural y religiosa, hace parte de la existencia humana. Y cuando lo pensamos en relación con la Biblia no tiene nada de extraño, aunque sí de extraordinario, pues la historia bíblica es fundamentada en el tema de migraciones. El movimiento de personas, de pueblos, del pueblo de Israel antiguo, es lo que define y da identidad a este pueblo. Más aún, la movilidad es el hecho fundante de esta historia. (Éxodo 1-5).

Así mismo, el tema migración tiene un carácter particular cuando se trata de las mujeres, tanto dentro como fuera de la Biblia. Centremos la atención en algunas Mujeres Migrantes dentro de las historias que están en la Biblia. Lo más significativo es que esas historias de movilidad involucran también a otros pueblos. Ejemplo de esto es el llamado que Dios hace a Abraham y su familia para salir de su tierra. La presencia de Sara al llegar a Egipto es fundamental para dar continuidad a toda la historia (Génesis 12,10-20)

En el relato del libro del Éxodo, las historias de las Mujeres Extranjeras y Migrantes, revelan no sólo la presencia de otros pueblos, sino que también dejan conocer las historias de solidaridad entre las mujeres israelitas y mujeres de esos pueblos. En ese sentido, vale mencionar: las mujeres parteras de Éxodo 1,8-20, la hija del Faraón en Éxodo 2,5-9; las vecinas de las mujeres israelitas que dan objetos que servirán para preparación de la salida Éxodo 3,21-22.

La solidaridad en la historia del libro de Ruth, donde Noemí es israelita Migrante en Moab, porque había hambre en Israel (Ruth 1,1-3) y luego Ruth, moabita migrante en Israel, quien para Noemí vale más que 7 hijos (Ruth 4,15)

No quiero dejar de recordar que las Mujeres Migrantes, también viven momentos de peligro, inclusive de violencia, tal es el caso de Dina (Génesis 34). Son momentos tan difíciles que da la impresión que hasta Dios desaparece. Sólo más adelante aparece. La actuación de los hermanos que se vengan es el único rastro de que no fue aceptada esa violación, y que Dios presente en la Biblia, se coloca como defensor del forastero pobre y del migrante.

En el Nuevo Testamento, destacamos a María que huye y se refugia en Egipto, para salvar la vida de Jesús, amenazada por Herodes (Lucas 2,13-15) la mujer sirofenicia, quien permite revelar el proyecto del Reino que Jesús anuncia, como un proyecto que no excluye (Marcos 7,24-30). La mujer samaritana (Juan 4,1-42), no por ser migrante, sí  por ser extranjera. Ella no tiene pena en dialogar con Jesús y reconocerlo como profeta. Y más, las palabras de esta mujer permitieron a otras personas conocer sobre Jesús.

Colaboración de Tirsa Ventura

No hay comentarios:

Publicar un comentario