sábado, 22 de octubre de 2011

Lectio Divina viernes 21 de octubre 2011, Tiempo Ordinario, Ciclo – A- Lecturas: Romanos 7,18-25; Salmo 118; Lucas 12, 54-59

PARA REFLEXIONAR CON LA PALABRA
CALIGRAFÍA ETERNA


1. Hagamos las LECTURAS 
Decía también a la gente: «Cuando ustedes ven una nube que se levanta en el occidente, al momento dicen: "Va a llover", y así sucede. Y cuando sopla el sur, dicen: "Viene bochorno", y así sucede. ¡Hipócritas! Saben explorar el aspecto de la tierra y del cielo, ¿cómo no exploran, pues, este tiempo? «¿Por qué no juzgan por ustedes mismos lo que es justo? Cuando vayas con tu adversario al magistrado, procura en el camino arreglarte con él, no sea que te arrastre ante el juez, y el juez te entregue al alguacil y el alguacil te meta en la cárcel. Te digo que no saldrás de allí hasta que no hayas pagado el último céntimo.

VEAMOS NUESTRA REALIDAD  -  Bastantes signos de los tiempos estamos viendo hoy; muchos, muchísimos. Y el que no los quiera ver…

2.  MEDITEMOS la lectura
a. ¿Qué dice el texto?
En muchas partes del Evangelio, Jesús reprende duramente a quienes le escuchan, por su falta de fe, su falta de confianza, por no darse cuenta de su presencia divina; y utiliza contra ellos palabras duras e hirientes, que producen escozor y rabia. Ellos esperarían otra cosa de ese hombre que habla de tantas cosas hermosas y que las habla con autoridad. Para la generación de Jesús, lo importante es buscar el bienestar material, el cumplir literalmente la Ley, pero sin tener presente a Dios. Se realizan acciones por cumplir, no porque sean necesarias para la salvación, ni menos para ir construyendo el Reinado de Dios.  Y por eso Jesús los critica duramente, les reprocha el que saben ver los signos y señales que se producen tanto en el cielo como en la tierra, pero no son capaces de ver los signos que él les muestra a través de sus palabras y de su actuar, que va mucho más allá de un simple cumplimiento de la Ley. Para Jesús, la vida debe ir más allá de sus propios afanes. Hay que experimentar en ella la presencia del Reinado de Dios.

b. Es posible que tu navegador no permita visualizar esta imagen.¿Qué nos dice el texto a nosotros hoy?
La mano bondadosa del Creador escribe y dibuja signos a través del entramado de la historia.

Leer estos mensajes eternos, descubrir esa caligrafía tan especial requiere una sinceridad corazón adentro que a menudo nos falta, y una capacidad de discernimiento -que todos poseemos- y que frecuentemente la utilizamos con fines mezquinos.

No obstante, es cuestión de saber abrir los ojos y aprender a leer nuevamente. Todo está allí, maravilloso y evidente, resplandenciente en la naturaleza, brillante en los animales y magníficamente inscrito con ternura y Misericordia en nuestras existencias.

Quizás esa sea la mejor lectura de los signos de los tiempos, saber mirar y ver la mano del Dios de la Vida en todas las cosas.

Aún así, hay más -siempre hay más-. La alegría que producirá el descubrimiento de este gran tesoro no es cuestión individual. Antes bien, tiene una proyección al prójimo, cercano y lejano.

Por ello la enseñanza del Maestro: lo imperioso es la reconciliación. Cuando tengo algo pendiente con mi hermano, mis pasos son pesados y torpes, y la mirada se me nubla.

Tal vez, tengamos una vertiente de misión en llevar reconciliación a las gentes y a toda la Creación.

3. CONTEMPLEMOS - Cultivemos la semilla de la Palabra en lo profundo del corazón
En su introducción, la Constitución del Vaticano II sobre la Iglesia en el Mundo de Hoy dice: “Es deber permanente de la Iglesia escrutar a fondo los signos de los tiempos e interpretarlos a la luz del evangelio, de forma que, acomodándose a cada generación, pueda la Iglesia responder a los perennes interrogantes de la humanidad sobre el sentido de la vida presente y de la vida futura, y sobre la mutua relación de ambas.” Por “signos de los tiempos” queremos significar corrientes de pensamiento y actitudes ante los acontecimientos, aspiraciones, problemas, movimientos de la humanidad, y semejantes. Pensemos en los hippis, el movimiento de Jesús, Pentecostalismo, la liberación de la mujer, el fuerte anhelo de liberación, la rebelión de muchos jóvenes contra el consumismo y la hipocresía... ¿Podemos descubrir puntos de contacto y de apertura a los valores del evangelio?

4.  OREMOS - ¿Qué nos hace decirle el texto a Dios?
Señor Dios nuestro: Mientras el mundo de hoy tiene hambre de justicia, de verdad y de valores espirituales,  quizá disfrazados o distorsionados en una forma difícil de reconocerlos,  abre nuestros ojos, y danos tu espíritu de sabiduría y discernimiento.
Así aprenderemos a comprender este mismo mundo,  a sentirnos como en casa con él y a descubrir las sendas y los pasadizos  que nos pudieran llevar  a todos nosotros hacia ti, por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

5. ACTUEMOS – ¿Cómo puedo vivir este texto hoy? 
Motivación:  Si queremos ser gente que vive en nuestro tiempo, tenemos que estar con los ojos abiertos a todo lo que sucede en el mundo a nuestro alrededor. “Nadie es una isla”. Nadie debiera vivir en un mundo aparte. Esta actitud nos abrirá los ojos también para comprender mejor nuestra fe. “EL TIEMPO ES COMO UN RIO”

a)      Nunca te justifiques a ti mismo con nadie…porque la persona que te quiere no lo necesita, y la persona que no te quiere no te creerá.

b)      No dejes que alguien se convierta en prioridad en tu vida, cuando tú solamente eres una opción en la suya…

c)      Las relaciones son mejores cuando son balanceadas.

d)     Cuando despertamos en la mañana, tenemos dos simples alternativas: “volvernos a dormir y soñar… o nos despertamos y perseguimos esos  sueños”. La elección es tuya!

e)      Hacemos llorar a los que se preocupan por nosotros; luego lloramos por aquellos que nunca se preocupan por nosotros y nos preocupamos por aquellos que nunca llorarán por nosotros. Esta realidad nos asalta en la vida más a menudo de lo que deseamos… ¡Es extraño pero ocurre! Una vez que te percates de ello, nunca será tarde para cambiar!

f)       No hagas promesas si estás contento. No respondas si estás triste. No tomes decisiones si estás enojado. Piénsalo dos veces… actúa sabiamente.

g)      Si vives diciendo lo ocupado/a que estás, entonces tú nunca serás libre. Si vives diciendo que no tienes tiempo, entonces tú nunca tendrás tiempo. Si vives diciendo que lo harás mañana, tu mañana nunca llegará.

h)      El tiempo es como un río… No puedes tocar la misma agua dos veces, porque la que ya pasó nunca pasará otra vez.

¡¡Disfruta cada momento de la vida!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario